EPILA, 3 - QUINTO, 0
CF. Épila 3 CD. Quinto 0
Fernando Rosel Lana. Socio del Épila y seguidor habitual del fútbol aragonés.
EL ÉPILA, “SANA LA HERIDA” SUFRIDA EN LA JORNADA ANTERIOR EN “LA HUERTA”, CON UNA IMPORTANTE Y CONVINCENTE VICTORIA FRENTE AL QUINTO, QUE INTENTÓ DE SALIDA EL “ASALTO VEHEMENTE” SIN ÉXITO, A LA PORTERÍA EPILENSE.
DATOS DE INTERÉS PREVIOS AL PARTIDO
Tras el estrepitoso e inesperado fracaso epilense de la jornada anterior, frente a su Afición, y tras una semana de abundantes y tensas declaraciones tanto “de corrillo” como escritas, se esperaba con inquietud y urgencia una victoria balsámica para los locales y su Afición, que borrara cuanto antes el “sabor ácido y el run-run”, que dejó el último partido de los epilenses, frente al Calatayud en La Huerta, activando la “alerta amarilla”.
Por ello, se pensaba por una parte que el triunfo no se le podría escapar a los locales, si no querían profundizar en la herida que les supuso la desagradable derrota en su primer partido en La Huerta ante su Afición, en el mismo inicio ya de temporada, y por otra que el Quinto no se lo iba a poner nada fácil a los epilenses, debido a que se encuentra en un buen momento con dos victorias en su haber, conseguidas en los dos encuentros jugados. Por lo que este hecho, y la necesidad obligada de los locales de obtener la victoria, hacían que este encuentro tuviera un especial interés, y levantara unas expectativas, mayores de lo que en principio le correspondían.
Por otra parte, los quintanos que ya sabían lo que es ganar en La Huerta, cuando en diciembre de 2015, en un desastroso partido de los epilenses, derrotaron de manera inesperada al cuadro local por 2 goles a 3, cuando paradójicamente, los de Quinto estaban ocupando entonces puestos de descenso, y los epilenses eran líderes en la tabla, por lo que acudían a este compromiso, listos para un posible “asalto” de nuevo de La Huerta epilense.
En este sentido, pues, el partido se presentaba cargado de interés y de cierta incertidumbre tensa, especialmente para los locales que, en caso de no alcanzar la victoria, podrían dar lugar con muchas posibilidades, a su primera crisis importante de la temporada
CIRCUNSTANCIAS AMBIENTALES Y OTRAS CIRCUNSTANCIAS
El partido, se jugó en césped natural en bastante buen estado, con una temperatura y grado de humedad muy agradables para la práctica del fútbol.
El encuentro fue presenciado por una discreta entrada de público local, sin que afortunadamente se produjeran ningún tipo de incidentes, desarrollándose todo en las gradas, con total y absoluta normalidad.
Como anécdota, se hace constar que, en las filas del Quinto, se alineó el jugador Carlos Usón, al que cariñosamente, yo lo apodé en mis crónicas durante muchas temporadas, “el Niño”, dada su juventud y calidad en el momento de recalar en el club epilense, dejando todo el tiempo que estuvo defiendo la camiseta epilense, un excelente recuerdo como jugador en el campo, y más si cabe aún como persona.
LABOR ARBITRAL
La siempre difícil labor arbitral, fue llevada a cabo por el colegiado Sr. Fernández Martínez, auxiliado en las bandas por los Srs Omar Diop, y Hernández Andrés. Labor, en la que el árbitro principal y sus auxiliares de banda, tuvieron a nuestro entender una labor discreta, en un partido que en general, no tuvo grandes dificultades para el arbitraje.
PLANTEAMIENTOS, JUGADAS CLAVE Y GOLES DE LA PRIMERA PARTE
La primera parte del encuentro, comenzó con un Épila bien plantado en el campo, con avisos ofensivos importantes, pero también algo nervioso en la parte central de la defensa en los primeros compases del encuentro, que con un Quinto salido de inicio como “corsario en alta mar al abordaje”, quiso sorprender en el inicio del encuentro, estando a punto de conseguirlo en hasta tres ocasiones, que el portero epilense Fabre neutralizó, en una tarde espléndida bajo palos.
De esta manera, en estos forcejeos iniciales en el ataque, por parte de ambos equipos, fue el Épila, quien llegó con más fuerza y eficacia a la portería rival, marcando ya en el minuto-5, su primer gol, obra de su delantero Marcos, terminado magistralmente una llegada combinatoria en tromba de todo el equipo local.
Poco a poco, el Épila se estabilizó en defensa, selló mucho mejor las posibles entradas de su rival, y se convirtió en el dominador del encuentro, siendo Kevin en el minuto-25, y Bes en propia meta en el minuto-40, al intentar despejar un balón envenenado enviado por Latapia, quienes elevaron el marcador poniéndolo en un claro y contundente 3-0 al final del primer acto, reflejo del claro dominio del equipo epilense sobre los quintanos.
PLANTEAMIENTOS, JUGADAS CLAVE Y GOLES DE LA SEGUNDA PARTE
En la segunda mitad, el Épila salió prácticamente con los deberes hechos, y se dedicó a gestionar de manera cómoda y sin sufrimiento alguno, la renta obtenida en la primera mitad.
El Quinto no le “perdió la cara al encuentro” en ningún momento, tomando con gusto pero sin eficacia de cara al gol, el dominio del balón, dedicándose el Épila a salir a contragolpe, y a mandar envíos largos de balón, para no pasar por el siempre peligroso “campo de minas” del centro del campo.
El técnico epilense, con el marcador claramente a su favor, y con el partido controlado, gestionó bien las salidas escalonadas de los jugadores de banquillo, aprovechando la circunstancia favorable para darles minutos de juego a todos sus jugadores de campo disponibles, llegándose así al final dl encuentro, sin que en esta segunda mitad hubiera cambios en el marcador.
DESTACADOS DEL ENCUENTRO
Por parte del Épila, cabe destacar el compromiso y buen juego de todos sus jugadores en el campo, y de manera especial la actuación soberbia en los primeros compases del encuentro, de su portero Fabre, salvando el que los visitantes, se adelantaran en el marcador.
Por parte del Quinto, es de destacar la actitud que tuvo como equipo en su salida al campo, lanzándose sin cortapisa ni especulación alguna, a por el partido, pensando quizás equivocadamente, que el “león epilense, estaba demasiado herido”, jugándole descaradamente y sin complejos al ataque, cosa que a mi entender, le costó cosechar la derrota al final ya de la primera mitad.
A nivel de jugadores, cabe destacar a su central Sarr, y a su centrocampista Carlos Usón.
EPÍLOGO
En definitiva, un partido vistoso, muy interesante y vibrante, que compensó a la Afición epilense del mal trago sufrido la jornada anterior. La próxima jornada, los epilenses visitarán el complicado escenario de la Dehesilla moratina, donde tienen el reto de revalidar esta buena imagen dada en esta jornada, tras subsanar errores evidentes de la jornada anterior, que felizmente esta jornada no han aparecido.