Épila 2 Alagón 2
Épila 2 Alagón 2
EL ÉPILA, CONSIGUE SALVAR “IN EXTREMIS” UN PUNTO EN “LA HUERTA”, FRENTE A UN SÓLIDO ALAGÓN, NEUTRALIZANDO UN CERO A DOS EN CONTRA, EN LOS ÚLTIMOS OCHO MINUTOS DEL ENCUENTRO.
Fernando Rosel Lana. Socio del CF Épila.
DATOS DE INTERÉS PREVIOS AL PARTIDO
El Épila empezaba esta temporada en grupo cambiado con respecto al grupo en el que habitualmente venía haciéndolo, debiendo de habituarse d esta manera, a un grupo de nuevos rivales. En este contexto, los epilenses recibían en casa, en su primera jornada, a uno de los que pensamos que por nombre e historia, será uno de sus rivales más directos, en el intento de conseguir el ascenso a la tercera división, como es el caso del Alagón, por lo que obviamente resultaba ser para los locales, un partido clave, tanto por el hecho de que se enfrentaba contra un rival directo, como porque era el primer partido jugado además como local ante su Afición en La Huerta.
Los epilenses llegaban a este primer partido de liga con mentalidad de ganador, tras disputar sus cinco encuentros de pretemporada, sin conocer la derrota, y sabedores que cualquier tropiezo en su terreno, les podía apartar de su objetivo de ascenso, lo que en caso de producirse, supondría la demasiado pesada losa para club, de contabilizar su ya tercer fracaso consecutivo.
Por su parte, el Alagón como serio aspirante también al ascenso, acudía a este encuentro, con la mentalidad de demostrar sobre el terreno de juego sus aspiraciones, intentando puntuar en el difícil campo de La Huerta.
Por todo lo anterior, pues, el choque entre el Épila y el Alagón, se veía a priori, como un choque tan interesante como incierto en cuanto a su resultado.
CIRCUNSTANCIAS AMBIENTALES
El partido, se jugó en el césped natural de La Huerta, en buen estado para la práctica del fútbol, con una temperatura muy calurosa especialmente en la primera mitad del encuentro (la segunda mitad fue climatológicamente más soportable), que obligó al equipo arbitral a llevar a cabo el “descansillo” reglamentario en estos casos para que la hidratación de los jugadores tuviera lugar. El encuentro fue presenciado por una buena entrada de público local, a la que se sumó un nutrido grupo de seguidores del equipo visitante, no teniendo que lamentar afortunadamente ningún tipo de incidente relevante, ni por parte de jugadores, ni por parte del público asistente.
LABOR ARBITRAL
La siempre difícil labor arbitral, fue llevada a cabo por el colegiado Sr, Silva Treviño, auxiliado en las bandas por los Srs. Martín Alda y Espino López. Hay que señalar de inmediato, que el partido derivó en cierta dificultad para el equipo arbitral, especialmente en la segunda mitad del encuentro, en donde la actuación del colegiado principal fue muy protestada desde la grada, subiendo la irritación de los aficionados epilenses desde el mismo principio de esta segunda mitad, anulando un gol en el minuto-47 (minuto dos de esta segunda mitad), a instancias de uno de sus líneas auxiliares, cuando en principio el árbitro principal pareció haberlo dado por válido.
En el minuto-65 del encuentro (minuto 20 de esta segunda parte), el árbitro pareció señalar el punto de penalti en el área del Alagón, cuando de nuevo a instancias del mismo línea, dio la impresión de volver atrás en su decisión, elevándose todavía más, el tono de irritación en La Huerta.
En cualquier caso, guardando siempre el necesario y debido respeto a las decisiones arbitrales, podemos constatar que la actuación del colegiado, Sr Silva Treviño, fue muy protestada y exageradamente dependiente de las valoraciones de uno de sus líneas auxiliares, dando la impresión de que se habían cambiado los papeles entre ellos, en lo que a las decisiones en las dos jugadas clave del encuentro se refiere (anulación del gol por fuera de juego, y posible penalti no ejecutado), dignas ambas dos de VAR. En este sentido, pues, puede decirse que lamentable el colegiado principal y uno de sus líneas, influyeron con sus decisiones en el resultado final del encuentro.
PLANTEAMIENTOS, JUGADAS CLAVE Y GOLES DE LA PRIMERA PARTE
En los momentos iniciales de este primer acto, en el mismísimo arranque del partido y antes de que se cumpliera el minuto-1, el Épila salió muy intenso de cara al gol, dando lugar a una peligrosa llegada al área del Alagón que concluyó con un buen disparo entre los tres palos, obligando al portero alagonero Jorge una excelente intervención, desviando el balón a córner.
Enseguida el Alagón tuvo su réplica, con un no menos peligroso acercamiento al área epilense en el minto-10, que su portero Fabre resolvió muy bien aunque con ciertos apuros.
El partido trascurría sin dueño claro, aunque creando más sensación de peligro el Alagón en jugadas a balón parado. Este mayor peligro, acabó en la consecución del primer gol alagonero en el minuto-16, como consecuencia de un tiro potente y raso al poste derecho de la portería epilense, llevado a cabo por Jorge Guerrero (la tarde iba a ir de “Jorges”), al que la cobertura del Épila falló estrepitosamente, dejándolo libre como “tórtola en monte abierto”.
A raíz de este gol, el Épila “pisó un poco más el acelerador” y aumentando su intensidad en un partido que se estaba jugando de poder a poder, llevó a cabo algunas llegadas a la portería de Jorge que, dicho sea de paso, realizó un gran encuentro a pesar de los dos goles encajados, realizando intervenciones muy meritorias para su equipo.
El encuentro iba consumiendo el primer acto, muy espeso y sin salir de la incertidumbre. En este sentido, en el minuto-31. El Alagón está a punto de marcar de nuevo en un rápido contragolpe, salvando el portero epilense Fabre en una excelente intervención, lo que ya parecía inevitable, mientras que por parte del Épila pierde en el minuto-44, en la última jugada del encuentro, en las botas de Nano la clarísima oportunidad de haber dejado en tablas el marcador, justo antes del descanso.
PLANTEAMIENTOS, JUGADAS CLAVE Y GOLES DE LA SEGUNDA PARTE
Nada más reabrirse el partido en esta segunda mitad, en el minuto 47 del partido, el Épila que salió con gran intensidad a por el encuentro, marca un gol que es anulado por fuera de juego a instancias de uno de los líneas, cuando el árbitro dio la sensopercepción de haber dado en principio como válido (jugada merecedora en cualquier caso de VAR), encendiendo la mecha de la irritación de los jugadores y seguidores epilenses.
La intensidad del Épila siguió “in crescendo”, ante un Alagón muy correoso, rocoso y muy bien situado en el campo, con las ideas muy claras y presto a dar el golpe de gracia al encuentro, en cualquier contragolpe.
En este caldo de cultivo y cuando el partido estaba ya en temperatura de ebullición, en el minuto-65 del encuentro, se produce la segunda y más que polémica decisión arbitral, al dar de nuevo la sensopercepción de corregirse en su primera decisión de pitar la pena máxima, a instancias de su auxiliar de línea, que eleva al máximo la indignación de los jugadores epilenses y de la Afición de La Huerta.
En este contexto de elevada intensidad, el Épila no decayó en su intento y siguió volcado con alma y corazón hacia la portería alagonera. Sin embargo, y como suele ocurrir en el fútbol, en el minuto-81 en un mortífero contragolpe por banda derecha y, tras un fallo defensivo de nuevo en el lateral izquierdo de la defensa local, un jugador alagonero consigue poner un centro de lujo al segundo palo de la portería epilense, al que tampoco puede llegar su otro lateral, y con una ejecución de libro con un cabezazo magistral, el Alagón marca su segundo gol, sin que el portero Fabre pueda evitarlo al llegarle el balón a palo contrario.
El mazazo de este gol para el Épila fue considerable, especialmente cuando quedaba ya muy poco tiempo. Pero a pesar de ello, el Épila no bajó los brazos y con intensidad y bravura y fe en sí mismo, siguió insistiendo en el ataque hacia la portería del Alagón, y justo un minuto más tarde (minuto-82 del encuentro), obtenía el premio de su esfuerzo y convicción, marcando por mediación del siempre laborioso y bravo Rubén un bonito gol de cabeza como producto de una falta directa, llevando el balón justo a la cepa del poste derecho de Jorge, donde casi ningún portero puede llegar, poniendo el 1-2 en el marcador.
El Épila aumento su fe en conseguir marcar de nuevo, se fue con gran intensidad y casi con rabia hacia adelante y, justo un minuto antes del final del encuentro (minuto-89), el colegiado (esta vez sí) señala el punto fatídico en el área alagonera. La tensión en La Huerta se puede “cortar con cuchillo”. Nano Rosagaray toma el balón, lo coloca en los once metros, el portero alagonero Jorge intenta la desestabilización habitual del delantero epilense, pero Nano lanza enviando el balón raso y ajustado a la mismísima cepa del poste derecho de la portería, dejando al portero alagonero Jorge, convertido en una “auténtica estatua”.
En La Huerta se vive el delirio de la alegría de lo casi imposible. En los ocho minutos finales, y con una EXCELENTE capacidad de reacción, había igualado un cero dos en contra. Todavía se vivirían los últimos y agónicos instantes de incertidumbre en el marcador, pues ambos equipos pudieron haber marcado el gol del triunfo
EPÍLOGO
En definitiva, pues, el partido cumplió con las expectativas de partido de la jornada, al ser muy intenso y con unas variaciones en el juego y en marcador, especialmente en los últimos minutos, propias de “infarto”.
El partido se jugó entre dos rivales que demostraron ser aspirantes al ascenso, con un Alagón que sorprendió en su presencia en La Huerta, por su buena posición en el campo, con una gran solvencia en todas sus líneas, por su rocosidad y velocidad resolutiva, por saber mantener en todo momento del encuentro sus ideas muy claras, y por su gran capacidad táctica.
Por parte del Épila, opinamos que dio muestras de ser un equipo también con cierto empaque, y especialmente con una gran capacidad de reacción ante el marcador adverso. No obstante, hay que decir también en su contra que los dos goles recibidos, fueron ambos por fallos de marca y cobertura, que hacen pensar en ciertos “cortocircuitos”, que tendría que corregir su técnico epilense si quiere dar muestra de mayor seguridad en su línea defensiva.
La liga acaba de comenzar y, después de este encuentro, las aspiraciones de ambos equipos siguen intactas.
