HARO DEPORTIVO, 3 - SD BORJA, 2
FASE DE ASCENSO A SEGUNDA DIVISION B
La SD Borja logra en Haro un resultado esperanzador de cara al partido de vuelta de la eliminatoria
HARO DEPORTIVO, 3 - SD BORJA, 2
Haro Deportivo: Adriá; Ander Montori (Josu, m.85), Carmelo Sota (Unai, m.70), Sabando, Pirri (Joseba, m.90); Álex Conde, Óscar Loza; Asier Molinos, Eneko, Javier Ibáñez y Txejo.
Borja: Siro; De la Mata, Motero, David Martínez, Machote; Roncal (Yuste, m.52), Puyo (Diego Gómez, m.52); Mercadal (Dani Marqués, m. 67), Cotoño, Dela y Tabala.
Goles: 1-0, m.26: Ander Montori; 2-0, m.49: Álex Conde (de penalti); 2-1, m.56: Diego Gómez; 2-2, m.73: David Martínez; 3-2, m.83: Sabando.
El Haro Deportivo ha evitado este domingo un severo disgusto en su debut, dos años después, en la escalada hacia la Segunda División B. Si en el arranque del segundo tiempo el triunfo parecía en el bolsillo (2-0 al minuto 49), el Borja se metió de lleno en la eliminatoria con dos acciones a balón parado de esas que irritan a los entrenadores.
Pero también fue gracias a la estrategia como Sabando enmendó la plana a siete minutos del final para apuntarle a los jarreros un triunfo que debe servirles, más allá de la ventaja que representa, como toque de atención para evitar sobresaltos en el choque de vuelta.
El duelo de El Mazo se ajustó en su inicio al patrón más recurrente de una eliminatoria a 180 minutos. Esto es, primero guardar la ropa y, si se presenta la ocasión, dar un par de brazadas. Respeto máximo entre dos equipos sabedores de que en el fútbol modesto -el mismo que aspiran a abandonar- se rige por la infalible teoría de la manta corta. Si te tapas el cuello coges frío en los pies y viceversa.
Tras 25 minutos en los que lo más interesante, de largo, sucedía en la grada del Municipal, el guardameta del Borja vino a protagonizar un error que sumergiría al encuentro en la locura. Con todo a favor para atrapar la pelota, el cuero se le escurrió como una anguila embadurnada en aceite y Ander Montori, que pasaba por allí, no desaprovechó el regalo para anotar el primer tanto de los blanquinegros en el playoff (1-0, m.26).
El tanto local hizo trizas el plan de partido adoptado hasta entonces por ambos técnicos. El aragonés, por estar obligado a asumir más riesgos para devolver el golpe encajado. El jarrero, porque se le presentaba la oportunidad de renunciar al protagonismo con el balón para optar a la sorpresa al contragolpe.
Y buscando qué rol encarnar andaba cada equipo cuando el silbato del colegiado les invitó a pensarlo mejor en la caseta. Pero si aún quedaban dudas en uno u otro bando, el arranque de la segunda mitad no hizo sino marcarle aun más el camino a locales y visitantes. Cuando apenas habían arrancado a sudar bajo el brillante sol riojalteño (ese que la visera de El Mazo no atina a tapar), un penalti en el área visitante invitaba a Álex Conde a colocar el 2-0 en el marcador. No falló desde los once metros y el Haro entró en un ralentí que casi le corta la digestión.
Giro inesperado
O tal vez fuese simplemente que el Borja había entendido que tenía hecha las maletas para las vacaciones y le pudo más la desesperación. Pero el hecho es que con dos zarpazos a balón parado declinó la balanza a su favor, con un empate de esos que -gracias al valor doble de los goles fuera de casa- saben a victoria.
Diego Gómez botó una falta digna de una categoría superior para recortar distancias (2-1, m.56) y David Martínez cabeceó a la red un saque de esquina de Cotoño para encender las luces en la fiesta del Haro a un cuarto de hora del final (2-2, m.73). Los blanquinegros apelaron a su último recurso para evitar el suspenso: casta y bemoles. Y obtuvieron la recompensa a su coraje cuando Sabando fue más hábil que nadie para batir a Siro a la salida de un córner y dejar la victoria en casa (3-2, m.83).
Con este triunfo, ambos conjuntos afrontan el encuentro de vuelta con la mochila cargada de fe. Los riojanos, por la ventaja obvia que han cosechado este domingo. Los maños, porque dos goles anotados fuera de casa supone un botín demasiado suculento como para bajar los brazos con 90 minutos por delante (quizás alguno más). En cualquier caso, el primer set de la eliminatoria es para el Haro, el único de los cuatro equipos riojanos que pueden celebrar un triunfo en este arranque del playoff.
