SENSACIONES AMBIVALENTES EN EL CF EPILA
EL EPILA REALIZA SU CUARTO Y QUINTO ENSAYO DE PRETEMPORADA, CON UNA PUESTA EN ESCENA DE SENSACIONES FUTBOLISTICAS AMBIVALENTES
Fernando Rosel Lana/Socio del Épila
ENSAYO CUARTO (jueves 17 de agosto)
OLIVAR DJH 3, EPILA 2:
LA MAGIA DE LA PRIMERA PARTE EN EL JUEGO EPILENSE, ACABO DANDO PASO A UN PROFUNDO Y PREOCUPANTE DESENCANTO, EN EL SEGUNDO ACTO DEL ENCUENTRO
Los epilenses, cayeron derrotados por 3 a 2, en el estadio del Olivar DHJ de Zaragoza, en un encuentro que tuvo dos partes opuestas por el vértice, que se celebró con una elevada temperatura, y que fue bien dirigido por el trío arbitral de turno.
En el primer acto, los epilenses, rozaron la magia del encanto futbolístico, siendo dueños del espacio, del tiempo y del juego en la mayor parte de estos primeros 45 minutos, y marchándose al vestuario con dos goles a cero a su favor, obra ambos goles del Mono Esteban, que realizó un gran encuentro.
El primer gol epilense, se consiguió en el minuto 10, como consecuencia de una entrada por banda derecha del Galgo Dani, que puso un balón al área desde la línea de fondo “tocando cal” y, allí, su “compañero de baile” el Mono Esteban, consiguió, con mucha convicción y hambre de gol, llevar el balón a las mallas zaragozanas, haciendo el 0 a 1 para su equipo.
El segundo para el Épila, se consiguió al filo del descanso, cuando en el minuto-42 como resultado de un saque de esquina, el balón es rematado a gol de nuevo por el Mono Esteban.
En la segunda parte, la elevada temperatura y el mayor número de efectivos, por parte, del Olivar para realizar cambios, hizo mella en los epilenses, que empezaron a manifestar sobre el terreno de juego un “apagón” físico y técnico tan profundo como preocupante, mostrándose tiesos, sin ideas, nerviosos, desorganizados especialmente en defensa, y totalmente a merced del Juvenil de Honor zaragozano, que acabo dándole la vuelta al marcador, marcando tres goles consecutivos ante un Épila desdibujado que, durante este segundo tiempo, apenas pudo cruzar la línea media del campo, y en donde su hombre más ofensivo el Galgo Dani no pudo realizar su juego en banda derecha, al no llegarle los balones que el solicitaba en continuo y permanente desespero, acabando siendo sustituido.
Ya en el minuto 48, el Olivar consigue sorprender al portero epilense Aleta en un buen y preciso disparo, recortando distancias. Solo siete minutos tardaron los zaragozanos en conseguir el empate a dos, y un poco más adelante, los locales marcaría el definitivo 2 a 3 en una jugada que “rompió todos los cristales del escaparate defensivo” del Épila, dejando al portero epilense Aleta “solo ante el peligro” frente al delantero del Olivar, que recibió un buen balón desde su línea medular, llevándose de esta manera el DHJ Olivar el encuentro, con todo merecimiento.
ENSAYO QUINTO (domingo 20 de agosto)
ACTUR LNJ 1, ÉPILA 2:
LA VENTAJA CONSEGUIDA POR LOS EPILENSES EN LA PRIMERA MITAD, SUPO SER MANTENIDA EN LA SEGUNDA, DESPLEGANDO UN BUEN OFICIO TÁCTICO DE POSICIONAMIENTO EN EL CAMPO
El Épila, con bajas importantes propias de pretemporada, consiguió esta vez una ajustada y meritoria victoria a domicilio por 1 a 2, frente al Actur LNJ, en una tarde noche con una temperatura muy agradable para la práctica del fútbol, bien dirigido por el árbitro a pesar de no tener asistencia en la bandas, en un encuentro bien diseñado y ejecutado por los epilenses, ante un Actur LNJ peleón, que presentó batalla en todo momento.
En los primeros compases del encuentro, el Épila cogió el mando del encuentro, aunque con algunas imprecisiones. El primer gol epilense llegaría tempranamente, concretamente en el minuto-7 como fruto de una buena combinación en ataque por banda derecha, que remata el Mono Esteban a la red zaragozana, un balón servido por Pablo García.
El 0 a 2 para los visitantes, llegó en el minuto-16, fruto de un buen momento de juego, como consecuencia de un excelente disparo a la escuadra desde fuera del área, ejecutado con potencia, precisión y enorme convicción, por el jugador del Épila Iván Aladrén, que sorprendió a propios y extraños, por su bella factura.
En el 36, el Actur LNJ consigue acortar distancias haciendo el 1 a 2 con otro golazo buscando escuadra de portería, también desde fuera del área, que sorprende al meta epilense Fabre.
A partir de este tanto, el encuentro se equilibró llegando al final del primer acto con la ventaja epilense de 1 a 2 en el marcador, que a la postre, sería el resultado final.
En la reanudación del encuentro, se vio un Actur LNJ mucho más intenso que la primera parte, teniendo más ambición de balón y presionando muy bien las jugadas. Por su parte, el Épila se posicionó muy bien el campo, juntando muy acertadamente sus líneas, sabiendo esperar muy bien tácticamente al rival, para sorprender con velocidad de cara a portería.
Ambos conjuntos tuvieron sus oportunidades de haber movido el marcador, destacando especialmente una jugada por cada equipo. La del Épila en un balón largo a la espalda de la defensa zaragozana, en donde Vakerito corre un balón hasta adentrarse en el área local, pero su fuerte disparo sale por encima de la portería local. Y en el minuto-85, el portero epilense Aleta salió afortunado en el mano a mano con un jugador del Actur LNJ, evitando el tanto.
Justo en la última jugada, el Actur LNJ gozaría también de una nueva oportunidad de conseguir el empate, en una jugada por banda izquierda que consiguió romper la espalda de la defensa epilense, pero el fuerte disparo del delantero zaragozano, salió por el lateral de la red de la portería epilense, terminado el partido con la victoria de los visitantes por 1 a 2, sin que se moviera el marcador establecido al final de la primera mitad.
Es de justicia destacar, la meritoria actuación de los dos técnicos que dirigieron con maestría y actitud sus equipos desde la banda, y especialmente la del técnico epilense Miguel Catalán, que no dejó ni un momento de espolear, corregir e instruir a sus jugadores, hasta el pitido final.
De esta manera, el Épila realiza su cuarto y quinto ensayo de pretemporada, con una puesta en escena de sensaciones futbolísticas ambivalentes, teniendo que corregirse algunas imprecisiones y, especialmente, algunos posicionamientos defensivos, ante el ya inminente comienzo de la competición liguera.
