UN EPILA EN CRISIS
EL EPILA LANGUIDECE COMO PRODUCTO DE UNA CLARA CRISIS, QUE LO ESTA HACIENDO ENTRAR, SI NADIE LO REMEDIA, EN CAIDA LIBRE HACIA EL DESCENSO
Que el CD Epila esta atravesando una crisis deportiva es evidente ya que ha pasado de ser equipo revelacion al inicio de temporada, a ocupar actualmente puestos de descenso tras encadenar 11 jornadas consecutivassin ganar
Carta de un Ssocio y aficionado incondicional del Épila.
Permítaseme comenzar con una metáfora, es la siguiente: si tenemos delante de nuestros ojos un animal con pelo en el cuerpo, cuatro patas con uñas escondidas, un rabo en el culo, con bigotes en la cara, que le gusta cazar ratones y además maúlla, coincidirán conmigo de que se trata sin lugar a dudas, de un gato.
Pues bien, sobre la base de este inicio metafórico, el que el Épila está en plena y aguda crisis, está claro como lo del gato de la metáfora que les acabo de contar. En este caso las evidencias de que se trata de una crisis, las baso en lo siguiente: lleva ya la friolera de once jornadas consecutivas sin conocer la victoria, hace dos jornadas tras recibir una sonora goleada en Borja, encajando “la media docena”, fue arrojado a los puestos de descenso, en estos momentos es el tercer equipo más goleado de la categoría solo superado por los dos últimos clasificados Andorra y Cuarte, ha dado lugar a que jugadores de los equipos rivales hagan su hat-trick particular, ha pasado de ser considerado un equipo revelación, respetado y muy valorado durante mucha parte de la primera vuelta, a ser un “cadáver futbolístico”, con el que todos sus rivales esperan sumar y aumentar su renta de goles, endosándole las goleadas de escándalo que ningún otro equipo recibe, estando en este momento en situación en las “boxes de urgencia”, con muchas posibilidades de ingresar en la UCI futbolística.
Cierto es que a su favor hay que destacar que esta última jornada el equipo epilense plantó cara al Almudevar en La Huerta, pero aunque en muchas fases del partido dominó el encuentro, manifestó una total incapacidad para materializar el gol, evidenciando una vez más su negación en el ataque. Es cierto, que la actitud en La Huerta fue aplaudida por los seguidores epilenses, pero solo con la buena acitud no se sale del descenso, y sigue siendo igualmente necesario analizar las necesidades de este equipo y moverse para intentar remediarlas lo antes posible, y al parecer hasta el momento ni Directiva ni Técnicos está por la labor.
Con estos datos, pues, creo que no les costará a ustedes esfuerzo alguno, valorar el estado del Épila, como un equipo con una clara crisis “de caballo”. Negarlo y querer ocultarlo, es como negar lo del gato de la metáfora inicial, y un insulto a la inteligencia de cualquiera, además por su puesto de, cuando menos, una clara irresponsabilidad.
Cuando suceden estas cosas en un club de fútbol, hay que tener la capacidad y las actitudes necesarias, por parte de Directiva y Cuerpo Técnico, para aceptarlo y, una vez analizada la situación, intentar buscar soluciones dentro de las posibilidades reales del club.
No es de recibo para nadie que siente los colores del club, que esas partes responsables en el tema, se crucen no solo de brazos, sino también de piernas, en espera de que “escampe”. Y desde luego deja mucho que desear la ética y la honestidad de los responsables directos de la gestión deportiva de este club, cuando señalan y acusan de falta de apoyo y de deslealtad al mismo, a las personas que nos dedicamos a intentar solucionar los problemas, que mantienen al Épila atascado en la crisis.
Acuden al viejo y manido tópico de que “la ropa sucia hay que lavarla en casa”, y que cuando las cosas van mal, lo que hay que hacer es animar y apoyar. El asunto aquí, estimados lectores, es que se trata de verdades a medias, recurso muy utilizado por las mentes retorcidas para sus propios intereses, ya que una verdad a medias, es una de las más potentes y peligrosas mentiras que se utilizan para intentar confundir, y manipular a la gente con la más burda de las demagogias.
Me explicaré. Respecto a lo de que la “ropa sucia hay que lavarla en casa”, soy totalmente partidario de ello, siempre que sea aceptado que la ropa está sucia, tal y como he señalado con datos en los párrafos anteriores, y se lave. En este caso, ni Directiva ni Cuerpo Técnico han admitido ni siquiera que haya ropa sucia que lavar. Cuando esto sucede, es cuando yo veo legitimo denunciar públicamente los hechos, e intentar remover las voluntades perversas y empecinadas en no ver “la mierda” (perdón por lo escatológico de la expresión) viviendo rodeados por ella día a día, sin intención de limpiarla como, mutatis mutandis, ocurre en el llamado “síndrome de Diógenes”, que obliga a intervenir desde fuera para hacer limpieza, evitando que se propague por el barrio una autentica epidemia. En resumen, que yo estoy harto de haber intentado lavar la ropa sucia desde dentro como directivo, pero lejos de escucharme me han señalado el camino del exilio voluntario, y desde ahora ya fuera de la directiva, como socio responsable deseo participar en la medida de mis posibilidades, en la denuncia de estos hechos con la única finalidad de espolear las voluntades de quienes tienen responsabilidades de gestión, en la búsqueda de soluciones.
Respecto, a la segunda “medio verdad”, de que ahora es el momento de apoyar y de estar unidos y no de, según sus palabras, de “echar mierda”, tengo que decir que respecto de lo de “echar mierda” ya lo he argumentado en el párrafo anterior, y respecto a lo de que hay que estar unidos y apoyar, les diré, que sigo estando unido y apoyando a mi club, pero no creo que lo que proceda en esta situación sea estar unido y apoyar los intereses particulares, que están llevando al Épila a la UCI futbolística, como he demostrado ya con datos en párrafos anteriores.
Pienso que los entrenadores y los jugadores, deben ser gestionados por la Directiva, y la Directiva debe gestionar supeditada a la soberanía del Club que forman socios y colaboradores, que son los que merecen el reconocimiento y el respeto por parte de las otras partes.
Es evidente, que cuando hay una crisis hay que apoyar y estar más unidos que nunca, pero llevando a cabo en paralelo el análisis y las tomas de decisión que procedan de manera responsable, por parte de todas los elementos implicados. En equitación, el jinete combina la fusta y las espuelas, con la caricia, el susurro y la comida en la mano a su caballo. Entonces es cuando surge la magia de la compenetración perfecta entre ambos, y el caballo da lo mejor de sí mismo en la carrera con nobleza y alegría. Por el contrario, cuando tenemos un mal jinete, el caballo se encorajina, se encabrita o se hunde. Creo en la inteligencia de todos ustedes para entender este símil, aplicable al futbol y al caso que nos ocupa.
Basta, pues, ya que jornada tras jornada, oigamos los mismos cantos de sirena, autocomplacientes, sonatas mejicanas de enamorado, y boleros nostálgicos de víctima bajo el balcón: Resulta ya cuando menos irritante oír partido tras partido los tópicos, tan manidos como ineficaces e irresponsables, del “no pasa nada chicos”, “arriba las cabezas”, “esto es futbol” y demás retahílas. Repito, ánimos todos, pero responsabilidades y cambios en la manera de llevar las cosas también. No soy partidario de ninguna de las dos cosas por separado, sino de las dos en sincronía responsable, eficaz y empática.
Ya vale de repetir las mismas “flatus vocis” o palabras huecas cada domingo de Unión, Sacrificio y Humildad. Estas palabras no hay solo que decirlas, hay que sentirlas y convertirlas en hechos. De lo contrario, son rotundamente un ejercicio de autoengaño y falsedad. El gran Albert Einstein dijo que es una estupidez humana seguir haciendo lo mismo, y esperar que las cosas cambien.
El domingo el Épila viaja a Tamarite y se la juega con un rival directo, muy aguerrido y muy difícil de batir en su feudo, mi gran alegría y la de todos sus seguidores, sería que este equipo que es el Épila mostrara un rostro muy diferente al que ha venido mostrando estas últimas jornadas, y se llevara los tres puntos en juego, y así pueda enderezar su curso.
Para ello, el cambio de actitud en Directiva y técnicos es imprescindible. No es ético ni responsable que nos pidan apoyar y unirnos al desconcierto. Pero sí daremos todo por nuestro Épila haciendo todo lo que haya que hacer, aplaudiendo y apoyando, y cuando sea necesario también señalando responsabilidades y exigiendo soluciones. Esto es amar responsablemente a un club, lo demás podrá ser una cuadrilla de amigos, que es muy respetable, pero de ninguna manera utilizando un club de futbol para ello. Y es que señores, guste o no, primero es el Club Épila y después todo lo demás. No se confunda el Equipo con el Club. El Club Épila es mucho más que su equipo, sus técnicos y su Directiva.
El que tenga ojos que vea, y el que tenga oídos que oiga. Por sus hechos los conoceréis y no por sus palabras.
Solo me resta decir que estoy abierto a cualquier tipo de argumentación ,y que me resbala cualquier tipo de insulto o improperio patán, que me puedan hacer las partes aludidas. A los argumentos contestaré siempre con contundencia y respeto. A los insultos no hará falta que les conteste, porque si hay algún patán que los profiere, el mismo se habrá descalificado, sin que haga falta que yo lo haga.
Atentamente, reciban mi más sincera consideración y respeto.
Fernando Rosel Lana. Socio y aficionado incondicional del Épila.
