Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Puede cambiar la configuración de su navegador u obtener más información a través de la Política de privacidad.

Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Entendido.

publicidad

Real Zaragoza, 1 - Granada CF , 1

Imagen destacada
El cuadro de Natxo González fue claramente de menos a más en un partido dende mereció la victoria

El partido comenzó mal para el equipo maño, pues el Granada CF desplegó mejor juego la primera media hora. Fruto de ello llegó su gol, obra del ex Pedro en un lanzamiento de falta por debajo de la barrera, algo que se está convirtiendo en habitual. Fue un tanto que llegó en una falta debida a la perdida de balón tonta por parte de la zaga maña. Sin embargo, a partir de ahí, los blanquillos se lanzaron a por el tanto del empate. El conjunto andaluz apenas existió desde entonces. No creó peligro, lo que propició que los laterales nuestros hicieran más profundas sus bandas.

Lo que queda claro es que a este equipo, le faltan extremos puros. Buff demostró en la mediapunta lo que se le había intuido en Boltaña. En una rápida transición del Real Zaragoza, el árbitro señaló la pena máxima en una acción sobre Borja Iglesias. El gallego no falló desde los once metros, poniendo las tablas en el electrónico. El colegiado expulsó a Baena por doble amarilla en el conjunto visitante, lo que propició mayor dominio si cabe del conjunto aragonés.

Toquero tuvo un palo, Zapater una falta directa que Javi Varás le sacó cuando ya se cantaba el gol. Desgraciadamente, no hubo tiempo para culminar la remontada, y el reparto de puntos alcanzado se antoja corto para los méritos de unos y otros. Natxo González tendrá que afinar en los errores defensivos, y en el acierto cara puerta, algo que deberá trabajarse más.